Segundas partes nunca fueron buenas, y lo comprobé cuando vi la película de Return to house on Haunted Hill, no fue en nada lo que yo esperaba, después de haber visto la primera llamada House on Haunted Hill.
En la primera de estas películas, la historia empieza con un hospital psiquiátrico que es tomado por pacientes que son torturados con supuestos fines de curas mentales, éstos pacientes matan a los doctores y a las enfermeras, además de quedar atrapados en el edificio que posteriormente se incendia. Años después, un hombre dueño de un parque de diversiones decide organizarle una fiesta sorpresa a su esposa en lo que antes fue el hospital. Sin embargo, por alguna extraña razón los invitados a dicha fiesta son desconocidos, que después nos daremos cuenta que están vinculados entre sí.
Sé que la historia de una casa embrujada que mata a todo aquél que entra en ella no es muy atractiva, porque en un momento podría pensarse que se trata, por ejemplo, de una similitud con la película Rose Red de Stephen King, pero no, Haunted Hill también tiene sus particularidades. Una de ellas es la música. Creo que ninguna película de terror puede considerarse parte de éste género si no contiene la música adecuada. Y en el caso de la película de la que escribo, me encanta que hayan usado Sweet Dreams de Marilyn Manson, tanto al inicio como al final de la película, considero que le da un toque especial.
Y por el contrario, en la segunda de éstas películas, no había música que te hiciera esperar un acontecimiento de gran suspenso y terror, además que la secuencia de la historia no se siguió de una manera adecuada, porque en momentos parecía que los personajes se encontraban en una casa totalmente distinta, y lo peor fue que los muertos estaban en contra de la casa, algo totalmente ilógico en relación al argumento de la primera película. Definitivamente no fue lo que yo esperaba y no me gustó.
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